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Jesus Before Pilate
"Jesus Before Pilate, First Interview" by James Tissot.
Leer en español después de la versión en inglés.
Christ The King Sunday Nov. 24, 2024
2 Samuel 23:1-7 and John 18:33-37
When the world breaks your heart, by faith, you will become stronger in the broken places.
David knew something about broken hearts. His heart was broken when his son died. It was grievously broken when he awakened to the guilt that overshadowed him in his sin to have Uriah killed. David’s final words no doubt come after a great deal of reflection on his past deeds, both good and bad. Through it all, David takes comfort in the covenant God made with his family. This could only come about because of David’s acceptance of his own sins and the consequences of his actions.
David’s resilient faith and his growing maturity allowed him to evolve from an outspoken killer of bears, lions and at least one giant, to a thoughtful leader and devoted servant of God, with an unwavering belief that God’s covenant will never be broken. For David, the pathway to truth was paved with prayer while humbling himself before God.
In contrast, In the Gospel of John, Pilate tries to play "20 Questions" with Jesus. “Are you the king of the Jews? I’m not a Jew, am I? What have you done?” For the most part, Jesus ignores Pilate’s questions and informs Pilate that his kingdom is not of this world. Jesus goes on to talk about his kingdom and what it actually is. Meanwhile, Pilate is biting at the bit, wanting to jump in and say, "So you are a king!” To this question, Jesus answers directly: "You say that I am a king … I came into this world to testify to the truth….” Then the most searching question comes from Pilate’s mouth, “What is the truth?”
Author Madeleine L’Engle once wrote, “Truth is frightening. Pontius Pilate knew that, and he washed his hands of truth when he washed his hands of Jesus. Truth is demanding. It won’t let you sit comfortably.”
Jesus' words probably made Pilate squirm a little – or a lot! Pilate was many things to many people; but above all, he was expedient. He needed to solve "the Jesus problem" quickly. He might have wanted to hear more from Jesus, but if he dared, he might have had to challenge some of his own disinformation that surrounded him and then come to see Jesus more clearly as "…the way the truth and the life.” (John 14:6)
A modern-day Pilate might have heard Jesus’ words, "… my kingdom is not of this world," to mean that Jesus' kingdom must be on the moon, Mars or somewhere else in the solar system. Pilate, like many of us, would miss the point. Jesus’ kingdom words were in reference to a new social reality, where "… real people in real relationships have discovered that because Jesus chose to die rather than fight, we can live together without coercion or violence.”*
What is truth? The truth is, in Jesus’ kingdom, that the practice of forgiveness and reconciliation have overcome the practices with which Pilate would have been more familiar, such as threat and coercion. Thanks be to God for Christ the King!
* L. Roger Owens from "Disciplines A Book of Daily Devotions 2024."
The Rev. M. Wayne Clark is a retired clergy member of the Iowa Annual Conference of The United Methodist Church.
¿Qué es la Verdad?
Memorándum para los que predican
24 noviembre, 2024 – Domingo de Cristo el Rey
2 Samuel 23:1-7; Juan 18:33-37
Por el Rvdo. M. Wayne Clark
Traducción por Paul I. Burrow
Cuando el mundo te rompe el corazón, por fe, te harás más en los puntos rotos. David sabía algo acerca de corazones rotos. Su corazón fue roto cuando murió su hijo. Fue roto gravemente cuando se despertó a la culpa que le proyectó una sombra en su pecado para matar a Urías. Las últimas palabras de David, sin duda, vienen después de mucha reflexión sobre sus acciones pasadas – ambas buenas y malas; a pesar de todo, David se consuela en el pacto que Dios hizo con su familia. Esto solamente podría haber sucedido a causa de la aceptación de David de sus propios pecados y las consecuencias de sus acciones. La fe resiliente de David y su madurez en crecimiento, le dejó evolucionar de un franco matador de osos, leones, y gigantes, pues por lo menos uno, a un líder reflexivo, siervo leal a Dios, y a una creencia firme que el pacto de Dios jamás será roto. Para David, el camino a la verdad fue pavimentado con oración mientra que él se humilló ante Dios.
En contraste, en el Evangelio de Juan, Pilato trata de jugar veinte preguntas con Jesús. “¿Eres tú el Rey de los judíos? ¿Soy yo acaso judío? ¿Qué has hecho?” Por la mayor parte, Jesús ignora las preguntas de Pilato e le informa a Pilato que su reino no es de este mundo. Jesús sigue hablando de su reino y lo que de verdad es; entretanto Pilato esperando su momento cuando puede decir, “Luego, ¿eres tú rey?” A esta pregunta, Jesús responde directamente. “Tú dices que yo soy rey . . . para esto he venido al mundo: para dar testimonio de la verdad. . .” Ahora viene la pregunta más escrutadora de la boca de Pilato, “¿Qué es la verdad?”
Madeleine L’Engle escribió una vez, “La verdad es espantosa. Poncio Pilato sabía eso, y se lavó las manos de la verdad cuando se lavó las manos de Jesús. La verdad es exigente. No permite que te sientas confortablemente.” ¡Las palabras de Jesús probablemente le hizo retorcerse a Pilato un poco o mucho! Pilato era muchas cosas a muchas personas, pero más que nada, era oportuno. Necesitaba resolver “el problema de Jesús” rápidamente. Es posible que quisiera oír más de Jesús, pero si se atrevió, es posible que tuviera que desafiar algunas de sus propias desinformaciones que lo rodeaban y podría haber tenido que ver a Jesús claramente como, “. . . el camino, la verdad y la vida.” (Juan 14:6)
Es posible que un Pilato contemporáneo pudiera haber oído las palabras de Jesús, “mi reino no es de este mundo,” para significar que el reino de Jesús debe estar en la luna, Marte, o en otra parte del sistema solar. Pilato, como nosotros, no entendería. Las palabras de Jesús sobre su reino eran en referencia a una nueva realidad social donde “ . . . personas verdaderas en relaciones verdaderas han descubierto que a causa de que Jesús escogió morir en vez de luchar, podemos vivir junto sin coerción ni violencia.”*
¿Qué es la verdad? La verdad es, en el reino de Jesús, la práctica de perdón y reconciliación han superado las prácticas con que Pilato habría conocido como amenazas y coerción. ¡Gracias a Dios por Cristo el Rey!
La Rev. Mara Bailey se desempeña como capellán en Simpson College en Indianola, Iowa.